La disolución del alcohol polivinílico es una operación muy delicada. Si la disolución no es buena, aparecerán micelas o incluso bloques duros, lo que afecta directamente a la operación posterior y a la calidad del producto. En primer lugar, el alcohol polivinílico se dispersa en agua fría. La dispersión significa que las partículas están dispersas en el agua, en lugar de formar un grupo grande. En la producción industrial, a menudo se colocan conos de material a granel en el puerto de alimentación y se controla la velocidad de alimentación.
La segunda es colocarlo durante un tiempo en agitación lenta o estática, para que el PVA se hinche en agua fría. El tiempo de hinchamiento se determina en función del tipo específico de PVA. A continuación, se calienta lenta y uniformemente a la temperatura especificada mientras se agita lentamente para disolver el PVA. La temperatura de disolución oscila entre 80 y 90 grados según el modelo específico. El principio de la agitación lenta es agitar el sistema sin burbujas de aire.
El PVA disuelto es un líquido viscoso transparente con una ligera luz azul.